He entrado en el último blog
propuesto, ElOrientablob, y me ha llamado la atención la entrada de este
domingo, el dilema de las expulsiones escolares.
Expone la necesidad o no de
expulsar a un alumno por la acumulación de partes, porque es la última opción que
tienen,…
Yo no creo que la expulsión sea
la solución, ya que desde mi punto de vista, el castigo impuesto no influye de
forma positiva en el alumno, ya que en su interior ese castigo no le “cambia”,
no provoca que actúe de forma contraria a la razón por la cual se le aplica
dicho castigo, además se junta con dos problemas:
En muchos casos el alumno ve la educación
como una obligación, por lo que una expulsión son unas vacaciones, estos casos
son caldo de cultivo para un futuro abandono escolar.
El centro se “lava” las manos, ya
que deja en manos de las familias las actuaciones a realizar (en muchos casos
estas familias no entienden las razones de la expulsión, o no pueden dedicarse
como desearían a su hij@ esos días por estar trabajando ambos, por lo que terminan
con familiares,…), es decir el castigo se transforma dependiendo de las
posibilidades de las familias en “otra cosa”.
Finalmente, creo que es más didáctico
encontrar la razón, el porqué de la actuación e intentar corregirlo, encauzarlo
con actividades/tareas dentro del centro de tal forma que el alumno sea
recuperable (desde el punto de vista en el que se indica que la expulsión es la
última opción,…).
Al hilo de esta noticia escogí
como actividad la de las “NORMAS DE CONVIVENCIA: Estudios de casos”
ya que de esta forma se consiguen varias cosas:
Puedes tratar casos que han
pasado recientemente en el centro, casos cercanos y casos reales o no y
posibles.
Haces que los alumnos se pongan
del otro lado, desde el de los profesores y así entiendan el porqué de las
decisiones, que surja cierta empatía.
Que vean el porqué de las normas,
los derechos y los deberes de cada uno.
Que busquen las razones de cada
acto y las posibilidades para evitarlos.
Se realice el trabajo en pequeños
grupos para que cada uno aporte y defienda sus ideas y después se exponga en común…
Esta actividad puede ser muy útil
ya que en un entorno sosegado y tranquilo se pude reflexionar sobre actuaciones
graves y llegar a cierto consenso, de tal forma que el alumno entienda y actúe
en consecuencia evitándolas en vez de sacar el tema en caliente cuando sucede.
Yo tampoco creo que el castigo y la expulsión sea la solución a un alumno conflictivo, se debe conocer el origen de ese comportamiento.
ResponderEliminarGracias Laura por leer mi blog.
ResponderEliminarComandante. Estoy contigo a este respecto. Creo que tratamos de educar en torno al "castigo" y es un flaco favor para los alumnos. como dices, para muchos la expulsión son días de vacaciones. La acumulación de partes para otros son un "mérito". En general habría que cambiar esta mentalidad de premios y castigos para poder hacer consciente al alumno de las "faltas" que puede estar cometiendo.
ResponderEliminarInteresante reflexión. Un placer leerte, aunque sea en los últimos días...
un saludo!